Menú semanal Plus | Cuarta semana de febrero 2025

Los paseos de Adriana, bici eléctrica en un clip, lo de las pipas y los españoles, buenas noticias para el medio ambiente, devolver los cascos y velas perfumadas baratas. Y recetas deliciosas.

feb 21, 2025

El menú semanal llega para ayudarte a organizar las comidas y cenas de la semana que viene. Haz tu lista de la compra y que el lunes te pille en perfecto estado de revista. ¡Que tengas una buena semana!

Encontrarás las recetas del menú semanal al fondo del pasillo de esta newsletter. Si al abrirla desde el correo se ve cortada, puedes expandirla desde “Ver todo el mensaje” o desde los enlaces “Ver en navegador” o “Leer en la app”.

man in brown jacket and gray pants walking on sidewalk during daytime — Imagen de Daniel Bernard en Unsplash

Adriana Herreros escribe sobre paseos. Porque las rutas que cada persona traza en las ciudades o caminos tienen mucho detrás: pensamientos, disfrute, ansiedad, relax… Leo Campo Visual y pienso que sí, debería pasear más.

Campo Visual | Por Adriana Herreros

Me ha llamado la atención un invento que permite, a cambio de unos buenos euros, convertir cualquier bicicleta en una bicicleta eléctrica. El artilugio se llama Clip Bike, pesa alrededor de 4 kilos (según modelos), tarda en cargar entre 30 y 60 minutos, y puede recorrer entre 10 y 24 kilómetros. Se engancha a la rueda delantera y se puede transportar fácilmente.

Clip Bike | Página web

Hace siglos que no como pipas y creo que no volveré a comerlas, pero cuando era jovenzuela, el panorama era muy diferente. Una buena bolsa de pipas para compartir sentadas en el respaldo de un banco aseguraba una tarde de charleta y ver pasar la vida.

Marieta Frías nos habla sobre las pipas y lo extraña que es esta costumbre a los ojos de un francés. De paso, te dejo el enlace a todo lo de Karambolage España, que es una joyita.

Karambolage España - Las pipas | ARTE.tv Cultura
Karambolage España| en ARTE.tv

man in black t-shirt and blue shorts standing on rock near lake during daytime — Imagen de Manuel Venturini en Unsplash

No todo son malas noticias en torno al medio ambiente. 2024 nos dejó un paquetillo de buenas nuevas con las que recuperar un poco el aliento y la esperanza.

Aliento para el planeta: las buenas noticias de... | Por Paula Matheu para National Geographic

selective color photography of glass bottles — Imagen de Drew Taylor en Unsplash

Tengo un recuerdo muy claro de ir a comprar el pan y la leche cuando tenía entre 10 y 12 años. Era algo que se hacía a diario y, cuando el cole lo permitía, en vacaciones y fines de semana, allá iba Martita con una bolsa rígida de polipiel en la que guardaba dos botellas vacías de Gurelesa azul.

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Yo entregaba las dos botellas azules –los cascos,– y me daban dos botellas iguales llenas de leche. En casa teníamos una zona en un armario para almacenar todos los cascos que se generaban en la casa (leche, vino, cerveza, gaseosa, etc.) para poder devolverlos y que nos dieran unos dinerillos.

La cosa funcionaba así y así aprendimos a hacerlo, hasta que abrazamos la modernidad y, por imposición, dejamos de dar importancia a los cascos, que se tiraban, se hacían añicos y, en el mejor de los casos, se reciclaban en vidrio nuevo.

A partir de finales de 2026 volveremos a este viejo sistema, cuando el Gobierno establecerá un anunciado sistema de depósito, devolución y retorno de envases ligeros.

Ecoembes y el depósito de envases: el dinero no siempre gana

two amber glass containers — Imagen de Storiès en Unsplash

Este final de invierno me ha invadido una insólita fiebre por las velas. Una fuerza desconocida me ha llevado allá donde hubiera una sección dedicada a las velas y los aromas. Tengo que parar ya.

Todo comenzó en Mercadona. Mientras revisaba la lista de la compra y pasaba del lineal de los detergentes al de las carcasas de pollo, de pronto vi unas velas de té perfumadas y acabaron en mi carro, aún no sé como.

Ya en casa, las encendí y olían a pastelito, a vainilla y a limpio. Ese fue el click. De allí pasé a Primark, que tiene una sección chulísima y a buen precio, y pequé en Zara Home, donde me hice en rebajas con una vela que huele a higos y que había dejado en el estante en temporada porque me venía mal vender un riñón.

La de Zara Home es higo puro, cara como ella sola y bonita como pocas, con un envase en cristal verde claro con tapa. Un capricho. Ya solo se puede encontrar en rebajas y me temo que habrá poquísimo stock a estas alturas.

Pero vamos las velas más asequibles que huelen rico (y que me llevé a casa):