Diez recetas vegetarianas para cocinar con slow cooker II
Cada vez más personas vegetarianas o veganas cocinan sus alimentos con slow cooker. Sopas, cremas, guisos de legumbres y verduras, estofados, pasteles salados y muchos platos más, encuentran una cocción perfecta y cómoda en la olla lenta. Hoy repasamos diez recetas vegetarianas hechas en crock pot que, además de estar buenísimas, despejan ese mito de que el slow cooker solo sirve para cocinar carnes.
Cocina vegetariana. Diez recetas más para cocinar con slow cooker
Puré de lentejas amarillas. Quizá no hayas reparado en estas lentejas repeladas y de color amarillo: son estupendas para hacer purés cocinadas con hortalizas; se deshacen con la cocción y tienen un sabor excelente, ¡búscalas en tu supermercado!
Quiche de verduras. Las verduras de temporada tienen en los pasteles salados y quiches un estupendo aliado para lucir en la mesa en bocados riquísimos. No dudes en cocinar una quiche de verduras con tus hortalizas favoritas.
Zarangollo. Dos productos de la tierra tan humildes como el calabacín y la patata se unen en una receta clásica de la huerta murciana perfectamente válida para una dieta ovovegetariana.
Lombarda con manzana. Un plato tradicionalmente navideño que tiene su lugar en la mesa durante todo el año. La lombarda añade variedad, color y sabor a una dieta vegetariana.
Tarta pasqualina. Esta torta italiana, típica de la Semana Santa, es perfecta para una dieta ovolactovegetariana. Si te gustan los pasteles salados, no renuncies a probar esta tarta de espinacas.
Verduras encurtidas. Las verduras encurtidas son perfectas para hacer batch cooking, para comer verduras frías y sabrosas cuando el calor aprieta y para olvidar las verduras en conserva industriales. Pruébalas y se quedarán en tu recetario.
Crema de lentejas rojas y batata. Las lentejas repeladas, tanto las rojas como las amarillas, son una excelente base para hacer cremas y tienen todas las propiedades beneficiosas de las legumbres. Si además te digo que esta crema está riquísima, no te queda más remedio que cocinarla.
Caldo de verduras. Pon un caldo de verduras vegetal en tus sopas y recetas de estofados de legumbres y verduras. Este es sorprendente, concentrado y lleno de sabor. Para hacerlo una y otra vez.
Sopa de cebolla. Solo con evitar el caldo de carne de la receta original y cambiarlo por un caldo de verduras o de cebolla, esta sopa se convierte en una opción lactovegetariana para una comida exquisita. ¡Corre a comprar cebollas!
Pepinillos encurtidos. Estos pepinillos son un buen complemento para un plato único vegetariano, además de un picoteo de lo más entretenido. Busca pepinillos mini en temporada y prueba esta pequeña delicia.