Alubias en curry
Un guiso de alubias hecho con legumbre de proximidad que tiene sabores de Asia.
Puedes escuchar el texto completo en este enlace al podcast.
La legumbre tiene muchas posibilidades. Si nos ponemos manos a la obra, podemos hacer un guiso diferente cada día. Está muy bien tener elaboraciones fijas, de esas que repites sin cansarte. Yo no renuncio nunca a las lentejas con chorizo, morcilla y panceta que tantas satisfacciones me dan, pero evito aburrirme, dando a cada legumbre una chispa diferente de vez en cuando.
Estas alubias en curry estaban en mi cabeza hacía tiempo. ¿Qué podía salir mal? Solo necesitaba que tuvieran algo diferente, que no fueran solo alubias cocidas picantes, y encontré la respuesta a ese algo en unos pimientos y tomates crudos.
Lo de la verdura cruda
Me parece una buena idea hacer un contraste entre los alimentos guisados al chup chup y unas hortalizas crudas que conserven el mordisco carnoso, como el tomate, o el crocante y el color del pimiento.
Si los cocinamos con el resto de ingredientes, ya sabemos lo que encontraremos: quedarán difuminadas, desechas y descoloridas. Esto no quiere decir que no aporten nada así. Son ingredientes que dan sabor y empaque, pero añadirlos crudos da un punto muy interesante y poco habitual.
El tomate se corta grandote para que se pueda morder y se deje sentir. El pimiento, un poco más pequeño. Ambos aportan color al plato y un choque de sabor. Ya me contarás si te ha gustado cuando las hagas.
Intensidad de picante
Cuando cocino con pasta de curry suelo ser prudente al inicio. Siempre hay momento para rectificar a mayores si nos hemos quedado cortos. Pero, si nos hemos pasado, no habrá manera de arreglarlo.
Por eso indico 25 g de pasta de curry en los ingredientes, que da un picor que se deja sentir pero no apabulla. Empieza por poco y aumenta al final si lo ves necesario. En ese caso, diluye la pasta que quieras añadir en un poco de caldo de las alubias, para que se pueda mezclar de manera rápida y homogénea.
Curry rojo o amarillo
Estas dos pastas de curry tienen ingredientes similares, pero los chiles utilizados suelen variar de una a otra. Es ese detalle lo que les diferencia y hace que unos sean más picantes que otros.
El verde suele ser una bomba de capsaicina, el más picante de todos. El rojo es picante también, pero más tolerable. El amarillo es el más suave.
Ahora que lo sabes, puedes escoger entre pasta de curry roja o amarilla dependiendo de lo que tengas en tu despensa o del nivel de picante que quieras poner en estas alubias.
¿Puedo hacerlo con alubias blancas?
Si son tus favoritas o las que tienes en casa, por supuesto. A mí me gusta más el sabor de las rojizas para este plato, pero con las blancas tendrás muy buenos resultados también.
El orden del tomate
Cuando hice esta receta por primera vez, puse el tomate concentrado desde el inicio de la cocción. Y fue la primera vez en años que las alubias no estaban hechas con los tiempos medios. Tardaron una eternidad en hacerse, y de nuevo tuve confirmación de que el tomate, que es ácido, no pone las cosas fáciles a las legumbres.
Por eso cambié el orden y añado el tomate concentrado casi al final, cuando las alubias ya están cocinadas y no hay riesgo de que queden duras o de que la cocción sea larguísima.
Preparación: 10 minutos
Cocción: 4-8 horas
Función: ALTA-BAJA
Raciones: 4
350 g de alubias rojas, canela o pintas
25 g de pasta de curry rojo o amarillo
Jengibre fresco
Media cebolla
85 g de tomate concentrado
2 dientes de ajo
1 pimiento verde italiano grande
2 tomates rojos
Menta fresca
Sal
Pon las alubias en remojo en un bol con abundante agua entre 8 y 10 horas.
Pasado ese tiempo, escurre el agua, enjuágalas y ponlas en el slow cooker.
Corta dos rodajas de jengibre, elimina la piel y ponlas en la olla lenta.
Pica la media cebolla en trozos muy finos y ponla sobre las alubias.
Añade la pasta de curry.
Rompe dos ajos con un mazo, elimina la piel y ponlos en el slow cooker.
Añade un arranque de sal1 y 1 litro y medio de agua.
Cocina durante 8 horas en función BAJA o 4 horas en ALTA o hasta que las alubias estén completamente cocinadas, tiernas y el caldo tenga consistencia.
Cuando las alubias ya estén tiernas, aunque no se haya completado la cocción, incorpora el tomate concentrado y mueve el recipiente para que se mezclen sin romperse.
Elimina la piel de los tomates y córtalos en trozos grandes, de unos 2 cm de lado.
Pica el pimiento en trozos de 1 cm de lado.
Cuando el guiso esté listo, prueba y rectifica el punto de sal y picante si es necesario, adaptándolo a tu gusto.
Añade el pimiento y el tomate picados. Mueve el slow cooker para que se mezclen. El calor residual los cocinará muy ligeramente durante unos minutos aun con la olla lenta apagada.
Pica 2 cucharadas de menta y espolvorea el guiso con la hierba.
El arroz blanco, cocido durante 9 minutos en agua hirviendo con sal y escurrido, es un buen acompañamiento para este plato de alubias.
Un arranque de sal es una pequeña cantidad de sal suficiente para que el núcleo de la legumbre tenga sazón y no quede soso. Siempre se prueba y rectifica si es necesario al final de la cocción.