Vinagreta de fabes con almejas
Esta primavera loca, llena de calores insoportables, fríos glaciales y tormentas golfísticas, no nos está dejando pensar en lo que se nos avecina. Porque, en menos que canta un gallo, estaremos clamando por comer cosas frescas y ligeras antes de dejarnos caer debajo de un pai pai gigante que nos alivie de los rigores veraniegos que nos esperan.
Y entonces vendrá el nutricionista que todos llevamos dentro con la copla de que hay que comer legumbres hasta en verano, y solo pensar en una fabada te hará entrar en una bajona de dimensiones épicas.
No pasa nada, vamos a comer legumbres fresquitas, ricas y bien aliñadas, y nos van a caer en el cuerpo como si fueran lechuga. Para eso tienes una crock pot en ese rincón de la encimera, ¿recuerdas? Durante los meses de calor nos va a venir de perlas para cocinar garbanzos, lentejas y judías durante la noche, al fresquito, y servirlas frías con vinagretas, aliños, conservas de pescados, verduras frescas y todo aquello que aporte vitaminas, oligocosas y te haga disfrutar en la mesa.
Esta vinagreta de fabes con almejas, versión no te olvides la toalla cuando vayas a la playa del plato tradicional asturiano, te va a encantar seguro. Cocina la legumbre por la noche o de víspera, corta las verduras, apaña las almejas mientras la familia se sacude la arena de la playa, y siéntante a comer con la conciencia nutricional tranquila.
Preparación: 40 minutos
Cocción: 8 horas
Función: BAJA
Raciones: 4
250 g de fabes
500 g de almejas
2 dientes de ajo
1 cebolla
1 zanahoria
1 to mate
1 hoja de laurel
Perejil fresco picado
50 ml de vino blanco
Sal
Aceite de oliva virgen extra
Para la vinagreta
1 tomate rojo
1/3 cebolla roja
1/2 pimiento verde
1/4 pimiento rojo
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre
Sal
Pimienta negra recién molida
Pon las almejas a purgar durante 24 horas en agua con sal. Cambia el agua tres veces eliminando las impurezas y la arena que vayan soltando.
Pon las fabes a remojo durante 10 horas.
Escurre las fabes y ponlas en el slow cooker junto con la cebolla pelada y cortada por la mitad, la zanahoria limpia y en trozos, y el tomate entero. Añade un poco de sal y el laurel. Cubre con agua y cocina durante 8 horas en BAJA.
Cuando estén cocinadas, retira las verduras de las fabes, escurre y guarda las fabes en frío.
Pica los dos dientes de ajo y ponlos en una sartén amplia con aceite de oliva al fuego. Cuando empiecen a moverse, antes de que tomen color, añade las almejas y mueve la sartén. Incorpora el vino blanco y deja que se vayan abriendo con el vapor. Desecha las almejas que no se hayan abierto por completo y espolvorea con perejil picado. Retira del fuego y deja que se templen.
Prepara los ingredientes de la vinagreta –la cebolla roja, los pimientos y el tomate–, y pícalos muy fino.
Coloca las verduras en un bol y añade aceite, vinagre, pimienta negra y sal, y mezcla. Añade una parte de caldo de las almejas a la vinagreta.
Monta el plato con una base de fabes, las almejas encima y la vinagreta cubriendo.
Esta vinagreta de fabes con almejas agradece un refrescante reposo en frío de las fabes y la vinagreta antes de montar el plato con las almejas y servirlo.
El tiempo de cocción de las fabes es orientativo. Para dar la talla en ensalada deben quedar firmes, enteras y tiernas por dentro. Vigila la cocción a partir de las 7 horas y, una vez están en su punto, déjalas enfriar fuera de la carcasa.