Tarta de fresas y almendra
Ya están aquí. Todos los años espero la temporada de fresas sentada junto al visillo, descorriéndolo de vez en cuando para ver si llegan, mientras veo pasar carretas y carretas llenas de mandarinas, naranjas, pomelos y manzanas. Es cuestión de tener un poco de paciencia hasta que por fin aparecen ordenadas en sus pequeños féretros descapotables.
Este año el invierno está siendo tan insignificante y preocupante, que llegaron antes de lo esperado, sin avisar, sorprendiendo a todos con su lomo rojo carmín y sus hojas coronándolas como penachos. Qué mejor bienvenida para estas estoloniferas que hacer con ellas una tarta de fresas y almendra, sencilla en su elaboración y ¡catabroum! en su resultado.
Es un bizcocho enriquecido con almendra molida sin coberturas complicadas, solo fruta y un poco de azúcar glass espolvoreado encima. No necesitas pretextos para hacerla, solo fresas maduras, material bizcochero y almendra molida. ¡Ponte a ello ya!
Preparación: 30 minutos
Cocción: 3 horas
Función: ALTA
Raciones: 6
250 g de mantequilla a temperatura ambiente
220 g de azúcar glass
140 g de harina
160 g de almendras molidas
8 claras de huevo
450 g de fresas frescas maduras
1 pizca de sal
Spray antiadherente o mantequilla para el molde
Azúcar glass para el remate final
Precalienta el slow cooker en ALTA mientras preparas la masa de la tarta.
Limpia las fresas, elimina las hojas, sécalas y córtalas por la mitad o en cuartos, dependiendo de su tamaño.
Funde la mantequilla durante unos segundos en el microondas a baja potencia o en un cazo a fuego muy suave. No es necesario que esté completamente líquida, solo que quede fundida.
Tamiza la harina y mézclala en un bol con la almendra molida y el azúcar glass.
Monta las claras a punto de nieve con una pizca de sal con ayuda de una batidora de varillas.
Añade las claras montadas en tres veces a la mezcla de harina, azúcar y almendra. Cada vez que añadas un tercio, mezcla suavemente a mano con una espátula hasta que quede integrada.
Incorpora 300g de fresas –reserva el resto para el final– y la mantequilla fundida, mezcla suavemente con una espátula hasta que quede una masa homogénea.
Rocía un molde con spray antiadherente o pincela con mantequilla a temperatura ambiente.
Vierte la masa en el molde, nivélala con la espátula o levantándola unos centímetros y dejándola caer en la encimera.
Coloca el molde en el slow cooker, pon un paño limpio sobre la olla abierta y coloca la tapa encima. Tensa el paño y cocina entre 2 y 3 horas en ALTA.
El tiempo es orientativo y depende de la potencia de tu olla y otros factores. Comprueba el punto de cocción pasadas dos horas: traspasa el centro del pastel con una brocheta. Si sale completamente limpia, estará hecho. Si sale húmeda, aún le falta cocción. Al tener fruta fresca, el corazón de la tarta puede tener tendencia a quedar húmedo y crudo, por eso es importante hacer la prueba justo en el centro.
Cuando esté hecho, saca la olla de la carcasa (para que pierda calor con más rapidez) y quita la tapa. Deja que repose hasta que se temple, extrae el molde y deja que se enfríe sobre una rejilla antes de desmoldar en frío.
Desmolda, coloca las fresas reservadas sobre la tarta y espolvorea con azúcar glass antes de servir.
Para hacer esta receta de tarta de fresas y almendras, puedes comprar botes de claras pasteurizadas. Son bastante fáciles de encontrar en supermercados y grandes superficies. Si utilizas huevos enteros, puedes aprovechar las yemas para hacer flanes.