Hace tiempo que quería hacer tarritos individuales de yogur en mi slow cooker. Que la crock sirve para hacer yogur, es algo que los crockys ya sabíamos hacía tiempo, pero faltaba comprobar que podíamos convertirla en una yogurtera de verdad, con sus botecitos y sus tapitas.
Cuando era niña, en España las yogurteras se convirtieron en la modernez más absoluta; podías hacer yogures en tu casa en un aparato mágico que aparentemente no hacía nada. Hacer tarritos de yogur en crock pot es muy sencillo. Solo había que dar con el proceso adecuado para no excederse en temperatura (por debajo de 50º) y experimentar con distintos acompañamientos para poder hacer yogures con dulces de frutas.
El procedimiento es este: se calienta el slow cooker con agua en el fondo sin que sobrepase los 50º. Mientras tanto, se preparan los tarros con las confituras, compotas o frutos secos, se calienta la leche en un cazo (nuevamente por debajo de 50º) y se mezcla con el yogur. Se vierte la leche en los botes y solo hay que dejar que reposen en el slow cooker apagado y bien abrigado durante varias horas.
Y salen, ¡ya lo creo que salen! Le leche debe ser fresca pasteurizada (yo uso Puleva fresca entera y queda muy compacto) y no hace falta añadir leche en polvo, gelatina ni ningún aditivo. Como verás en la lista de ingredientes, utilizo un yogur griego, que le da más consistencia, pero si quieres eliminar grasa, puedes usar un yogur normal. Con esta receta dejarás de mirar con ojitos a esos yogures carísimos que se ven en los lineales.
Sí, esos que van en frasco de vidrio, llevan mermeladas y compotas y valen un doblón cada uno. Ahora puedes hacerlos en casa y te saldrán riquísimos. Échale imaginación y utiliza distintos complementos de frutas, o prescinde de ellos y haz yogures naturales puros y duros. Yo he utilizado mermelada de naranja amarga, de arándanos, de albaricoque, compota de manzana, cerezas confitadas, pepitas de chocolate, nueces y pistachos. ¿Qué les vas a poner tú?
Preparación: 30 minutos
Cocción: 45 minutos
Reposo: 8 horas
Función: ALTA
Raciones: 10 tarros
Termómetro de cocina
Vasitos de vidrio
1,5 l de leche entera fresca pasteurizada
1 yogur griego
Mermeladas, (confituras, compotas de frutas o frutos secos.)
Vierte un poco de agua en el recipiente del slow cooker (no deberá cubrir los botes), enciende la olla lenta en ALTA y pon la tapa. Vigila la temperatura del agua y apaga y desenchufa la crock pot antes de que llegue a 50º.
Pon la leche en un cazo y caliéntala a fuego suave hasta los 45º. Añade el yogur griego y mezcla con unas varillas.
Prepara los tarritos poniendo en el fondo las mermeladas, compotas, frutos secos y confituras escogidos.
Si quieres hacer vasitos de yogur sin sabores ni complementos, prescinde de ellos.
Vierte la mezcla de leche y yogur en cada tarro, tápalos (si tienes tapas), y colócalos en el recipiente del slow cooker.
Pon la tapa, cubre el slow cooker con una toalla y deja que repose durante la noche o unas 8 o 10 horas.
No hay problema en apilar los botes dentro del slow cooker; los yogures se harán igual y aprovecharás el espacio. Solo tienes que tener la precaución de que queden bien colocados y no se muevan.
Para hacer tarritos de yogur individuales puedes aprovechar los pequeños frascos de vidrio en los que se venden algunos yogures. Yo he utilizado también algunos modelos de tarros Weck con cierre hermético.
No es necesario poner tapa al elaborarlos, de manera que si tienes tarros sin tapa solo tendrás que tener cuidado para que no entre agua ni se vierta la leche. Puedes guardarlos tapados con papel de cocina metálico.
El yogur griego aporta algo más de grasa y se obtiene un yogur bastante cuajado y firme. Puedes usar también yogur natural normal, pero puede que el resultado sea algo más líquido.