Porrusalda
Porru (puerro) y salda (sopa). Pues nada, porrusalda, sopa de puerros, ya lo tenemos claro. Si alguna vez te habías preguntado de donde viene este nombre tan sonoro, que lo mismo te define una sopa que una danza, ahora ya sabes que no es sino la unión de dos palabras en euskera que anuncian el sentido principal de este plato.
Sobre la receta de la porrusalda hay muchas variantes: la pescatera, en la que se incluye bacalao y que se presume comenzó a cocinarse para ilustrar este guiso humilde y vegetariano con un pescado que no atiende a criterios de temporalidad ni frescura, siempre a mano lejos de las costas; la carnicera, con costilla de cerdo salada, o la verdulera, cocinada simplemente con verduras de la huerta.
Esta última es la que siempre he conocido en la mesa de mi madre, no habiendo probado nunca las otras versiones proteínicas, y esta es la que he cocinado a fuego lento en la crock pot. El resultado, como todo guiso que lleve patatas, ha sido excelente: el puerro en pleno punto de ternura, la patata deshaciéndose levemente en el plato, y un caldo sabroso y reconstituyente.
Es un guiso que se agradece tanto en días fríos como en dietas de desintoxicación. Un plato de lunes, de los de hacer con lo que tienes en la despensa después de un fin de semana loco. Busca un par de puerros en el cajón de las verduras y déjate de excusas para comer sano.
Preparación: 30 minutos
Cocción: 4 horas
Función: ALTA
Raciones: 4
1 cebolla
2 puerros
3-4 zanahorias
2-3 patatas (400g)
750 ml de caldo de verduras (o de ave)
Perejil fresco
Aceite de oliva virgen
Sal
Elimina la raíz del puerro y la parte verde más tosca. Lava bien los puerros para eliminar por completo la tierra. Sécalos y córtalos en trozos de aproximadamente 2 o 3cm.
Reserva dos pieles de puerro de unos 10 cm para hacer un bouquet garní con dos ramitas de perejil fresco.
Pica la cebolla en juliana.
Pela las zanahorias y trocéalas en rodajas gruesas.
Pela las patatas, lávalas, sécalas y córtalas en trozos toscos, dando un corte incompleto y chascando la patata al final.
Coloca las hortalizas troceadas, el bouquet garní y el caldo en el slow cooker junto a 75ml de aceite de oliva virgen.
Según el punto de sal que tenga el caldo que utilices (de verduras, aunque puedes utilizar de ave) añade un poco de sal (sin pasarte, al final rectificaremos el punto correcto de sal).
Pon la tapa y programa el slow cooker durante 4 horas en ALTA.
Cuando termine la cocción, rectifica de sal, añade algo más de caldo si es necesario y espolvorea con perejil fresco recién picado antes de servir la porrusalda bien caliente.
Para elaborar la porrusalda se recomienda utilizar caldo de verduras, pero si no lo tienes a mano, puedes utilizar agua. También, como se apunta en la receta, puedes usar un caldo de ave suave.
Para limpiar los puerros, abre con un cuchillo la parte más verde para poder lavar con agua el interior del puerro. Es allí donde la tierra suele quedarse tras la recolección.
Las cuatro horas de cocción son aproximadas y dependen del tipo de patata que utilices.
Las verduras sueltan agua al cocinarse y en la crock pot no hay evaporación, por eso es mejor quedarse corto con el caldo y añadir un poco más al final si no quieres obtener una sopa aguada en exceso.