Placas de chocolate con cosas
Doble placer: el de hacer estas placas con tu familia o quien se apunte, y el de comerlas descubriendo puntitos de sabor dulces y salados que se funden con el chocolate.
Puedes escuchar el texto completo en este enlace al podcast.
De vez en cuando me pongo traviesa con el chocolate y empiezo a fundir y fundir en el slow cooker. Pasarse con el calor es fácil cuando trabajas con chocolate, pero derretirlo con una olla lenta es ir sobre seguro.
Estas placas de chocolate con cosas son una propuesta para pasar el rato en las vacaciones de Navidad, con los peques o en familia. Se iban a llamar “placas de chocolate con semillas y frutos secos”, muy rimbombante, pero como llevan algo más que eso, pues se ha quedado en “chocolate con cosas”, que es espartano, descriptivo y desprovisto de toda tontería.
Las placas
Otras navidades me ha dado por hacer turrones de chocolate, que aunque no son turrón turrón (que me perdonen en Jijona), lucen mucho y desaparecen de la bandeja en minutos.
Pero este año quería hacer algo aún más fácil, sin ni siquiera tener que atemperar el chocolate ni hacer mezclas, porque lo que queremos es divertirnos, con la chavalada o a solas, hacer nuestras placas, romperlas con las manos –o con un sable láser– comérnoslas o regalarlas. Y fardar, fardar mucho.
Hacer placas nos evita tener que pensar en moldes. Si tienes una lámina de Silpat, fantástico. Si la tienes de silicona, genial. Si solo tienes papel de horno, dale fuerte y a hacer placas.
El chocolate
Cuanto mejor sea el chocolate de base, más ricas saldrán. Utiliza chocolate para postres. Uno de tableta vale; además, lo encontrarás a buen precio en cualquier supermercado.
Pero si quieres rizar el rizo, porque el chocolate te encanta o vas a regalar las placas y quieres algo más lucido, te cuento el que usé yo: un Origine Tanzanie 75% de cacao de Barry. No es barato precisamente, pero, ¡ay cómo sabe y qué bien se trabaja! Un locurón.
Las cosas
Aquí entran, llamémosles complementos variados (por no llamarle toppings, que somos de barrio). Se pueden combinar entre ellos para formar distintas placas o escoger una sola combinación y hacer una placa enorme.
Patatas fritas
El contraste dulce y salado funciona siempre y sumado al amargor del chocolate es una maravilla. Hace poco, comprando el el súper, vi una pequeña tableta de chocolate con patatas fritas de una conocida y exclusiva marca.
Lo probé y fue un bluf. El chocolate no se lucía mucho, no era sabroso ni fundente y las patatas, si en algún momento hubo patatas en esa tableta, estaban tan pulverizadas que no se dejaban notar.
Me volví a casa algo decepcionada pero con la determinación de probarlo con unas buenas patatas de bolsa. Y funcionó. Las combiné con nibs de cacao y láminas de sal maldon para que la fiesta fuera completa. Las rompí en trozos medianos, porque quería que la patata se viera y se mordiera a gusto.
Nibs de cacao
Comer nibs de cacao a palo seco es una mala idea, pero cuando los combinas con otros alimentos como yogur, helado, leche, o los pones en una placa de chocolate negro con patatas fritas, entran en tu despensa para no irse jamás.
Son pequeños trozos de de cacao tostados. Tienen el sabor amargo del cacao y son crujientes. Da gusto encontrarlos en un bol de desayuno o como tropezón en otras preparaciones. No son nada baratos, pero cunden mucho.
Láminas de coco
No confundir con el coco rallado, eso es otra historia. Las láminas de coco quedan mejor cuanto más deshidratadas estén, por eso puede que, si están un poco lacias, les vaya bien un toque de horno, un paso por la sartén (sin aceite, en seco) o un ratito en la freidora de aire.
Se trata de hacerlas más crujientes eliminando la humedad que puedan tener, pero no deben cambiar de color ni tostarse. Cualquier proceso debe estar controlado al segundo para que no se quemen.
Pistachos
Enteros o ligeramente troceados. Valen perfectamente los que llevan sal, porque ese contraste dulce/salado funciona de maravilla. Sácalos de la cáscara, quita la piel y déjalos enteros o trocea muy ligeramente para que se noten bien.
Almendras garrapiñadas
En Navidad no es difícil encontrarlas y van muy bien cuando quieres hacer una placa que tenga trozos grandes de frutos secos y un dulzor extra, el de su capa de caramelo.
Semillas
Vale cualquier mezcla de semillas, cuanto más variada mejor. Igual que con las láminas de coco, si están algo blandas, un paso rápido por la sartén (sin aceite, en seco) las vuelve crujientes y mucho más interesantes.
Flores secas comestibles (o deshidratadas)
El punto cuqui del que puedes prescindir, pero interesante si tienes curiosidad y quieres hacer algo original. En comercios especializados se puede encontrar flor de malva de la marca Onena, en el tarrito típico de la casa. También se pueden comprar a granel. En Casa Ruiz tienen flores de hibisco, de lavanda y ensalada de flores.
Preparación: 10 minutos
Cocción: 30 minutos
Función: ALTA
Raciones: 1 placa grande de 600 g aprox
Plancha de silpat, silicona o papel de horno
Espátula
500 g de chocolate negro para postres
Frutos secos variados: nueces de pecán, nueces, pistachos
Patatas fritas
Almendras garrapiñadas
Frutas confitadas o escarchadas: papaya, naranja o jengibre
Láminas de coco, nibs de cacao
Mezclas de semillas, pipas de calabaza
Flores secas comestibles: malva, lavanda, pétalos de rosa, etc.
Sal maldon
Combinaciones realizadas
Patatas fritas, nibs de cacao y sal maldon
Almendras garrapiñadas, láminas de coco, flores de malva y sal maldon
Nueces de pecán, pistachos, nibs de cacao, flores de malva.
Papaya escarchada, pétalos de rosa, sal maldon.
Pon el chocolate troceado en el slow cooker.
Calienta en ALTA durante aproximadamente 30 minutos o hasta que esté completamente fundido. Mueve con la espátula de vez en cuando para distribuir el chocolate y que se funda de manera uniforme.
Para hacer varias mezclas distintas, utiliza varios boles.
Prepara una partida de complementos en una tabla para poder escoger y hacer tus mezclas a partir de los ingredientes, las combinaciones sugeridas o las que hagas a tu gusto.
Prepara la mezcla de complementos en un bol.
Pon varias cucharadas de chocolate en otro bol, añade una parte de la combinación de complementos escogida y mezcla.
Vierte el contenido del bol sobre el silpat, extiende y añade el resto de la mezcla encima de manera armoniosa. Si vas a poner sal maldon, añade unas láminas sobre la placa para que se vean.
Repite la operación con cada combinación de frutos secos, semillas, etc.
Deja que se enfríe y endurezca por completo antes de trocearlo. El tiempo de enfriado dependerá de la temperatura de la habitación y la encimera.
Trocea con la manos y corta con un cuchillo para hacer los trozos a tu gusto. Puedes hacerlos pequeños o dejar grandes placas para regalar.
No desatiendas el fundido del chocolate. Puede tardar entre 20 y 40 minutos en deshacerse, pero no conviene que se caliente de más.