Milhassou de calabaza
Muchas veces, las recetas dan vueltas a lo largo del tiempo hasta llegar a la forma en que las conocemos ahora. Es el caso del milhassou, una elaboración francesa a base de harina de maíz: en su origen era una receta salada que derivó en un postre dulce, aderezado con distintas frutas u hortalizas, como este milhassou de calabaza que hoy te traigo a Crockpotting.
En Francia se le conoce también como millas o millassou. No es un pastel como los que estamos acostumbrados en la gastronomía española: es compacto y, al estar hecho con harina de maíz, tiene un sabor diferente, que se acentúa con la presencia de la calabaza asada. Tampoco es un bizcocho, se parece más a un flan parisino o un pudin con el interior firme y bien cuajado.
Puedes controlar la textura añadiendo más o menos tiempo de elaboración. Cuanto más lo cuezas, más duro estará el interior. Si te gusta una textura más suave, deja que se cocine por fuera, que quede una costra cocinada, pero no esperes a que se tueste por completo. Presionando la superficie podrás comprobar el punto del milhassou, más o menos elástico y tierno, y ajustar los tiempos de cocción a tu gusto.
Preparación: 40 minutos
Cocción: 5 horas 30 minutos
Función: ALTA
Raciones: 6
500 g de calabaza pelada y despepitada
125 g de azúcar
80 g de mantequilla
200 g de harina de maíz (amarilla)
250 ml de leche
50 ml de ron o agua de azahar
5 huevos
Extracto de vainilla líquida
1 pizca de sal
Mantequilla fundida o espray antiadherente
Azúcar glass
Corta la calabaza en dados, colócalos en el slow cooker y ásalos entre 3 y 4 horas en ALTA o hasta que estén tiernos.
Haz un puré con la pulpa de calabaza fría con un pasapurés o un aplastapatatas.
Precalienta el slow cooker en ALTA mientras preparas los ingredientes o durante una hora.
Funde la mantequilla en el microondas o en un cazo a fuego suave.
Pon la pulpa de calabaza en un bol grande, añade la mantequilla, el azúcar, los huevos, la vainilla, la sal y mezcla por completo. Incorpora la leche, el ron y vuelve a mezclar.
Añade la harina de maíz y remueve con una varilla hasta que quede completamente integrada.
Pincela un molde de tartas con mantequilla fundida o espray antiadherente.
Coloca el molde vacío en el slow cooker y vierte la mezcla en el molde.
Pon un paño de rizo o microfibra sobre el recipiente, coloca la tapa encima y cocina durante una hora y media o hasta que la torta esté cocinada.
Desmolda cuando el milhassou esté frío y espolvorea con azúcar glass antes de servir.
Adapta el tiempo de cocción a los resultados que quieras obtener: a más tiempo, el pastel será más compacto; a menos tiempo, más blando y elástico.
Puedes utilizar cualquier variedad de calabaza (menos la calabaza cidra, que tiene otras aplicaciones). Lo importante es utilizar los productos que tenemos más cerca y más a mano.
La calabaza se puede cocinar con antelación y usarla en frío o aprovechar restos de calabaza cocinada para otras elaboraciones.