Codornices estofadas con níscalos
Coturnix Coturnix parece el nombre de una heroína de comic o el nombre en clave de un espía del CNI. Pero no, Coturnix Coturnix es el nombre científico de la codorniz, la pequeña ave que domina la escena en esta receta de codornices con níscalos en crock pot.
Es un plato clásico del otoño para grandes ocasiones o simplemente para ponerte como el tenazas comiendo con las manos porque tú lo vales. En esta receta, los pasos previos –salteado por partes y reducción de vino y caldo– son esenciales para resaltar todo el sabor de las codornices y las setas, así que no te recomiendo que la transformes en un topadentro para ahorrar tiempo.
El reposo le va muy bien, pero al ser un plato de tiempos muy cortos –para la media de la cocción lenta, claro– puedes hacerlo durante la mañana y tenerlo listo para la comida.
Preparación: 45 minutos
Cocción: 2 horas
Función: BAJA
Raciones: 6
6 codornices
400 g de níscalos
6 cebollitas o chalotas
1 manzana
75 ml de Oporto, (vino blanco u oloroso)
75 ml de caldo de ave
1 bouquet garní
Espesante de fécula ((opcional))
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta blanca recién molida
Sal
Elimina los restos de plumas de las codornices quemándolas con un soplete de cocina.
Pela las cebollitas o las chalotas y pártelas en dos. Saltéalas en una sartén con aceite de oliva hasta que se doren. Cuando estén listas, ponlas en el slow cooker.
Limpia los níscalos con un paño o un cepillo (no los mojes). Trocea los más grandes con las manos.
Salpimienta las codornices.
Corta la manzana en dados grandes. Saltéala en la sartén con un poco de aceite durante cinco minutos y vuelca en el slow cooker.
Saltea en la misma sartén las codornices a fuego fuerte con una cucharada de aceite hasta que se doren ligeramente. Añade el vino y deja que reduzca durante 2 minutos. Incorpora el caldo, deja que reduzca durante 2 minutos y coloca las codornices acomodadas en la crock pot entre las cebollitas y la manzana.
Limpia la sartén con papel de cocina y saltea los níscalos con muy poco aceite durante unos minutos. Colócalos en la olla lenta junto con las codornices. Añade el bouquet garní.
Cocina durante 2 horas en BAJA. Comprueba el punto de cocción –que la carne este tierna– pasada la primera hora y media.
Recoge la salsa que haya quedado en la olla y, si la quieres con más cuerpo, espésala con espesante instantáneo de fécula[(de Maizena, por ejemplo).
Sirve cada codorniz con un poco de salsa y la guarnición de níscalos, cebollitas y manzana.
Los níscalos, como todas las setas, son delicados y no deben mojarse. Límpialos con un cepillo específico para limpiar setas, aunque también puedes utilizar un paño de microfibra limpio y ligeramente humedecido para eliminar la tierra del sombrero.
Escoge bien en el mercado cuidando que se vean bonitos y tengan pocas motas verdes, que denotan el tiempo pasado desde la recogida y una manipulación agresiva al recolectarlos.
Cómpralos cuando vayas a utilizarlos, no es conveniente guardarlos mucho tiempo en la nevera ni fuera de ella, ya que irán oxidándose con el paso del tiempo.