Chocolate negro con naranja confitada y nueces
Naranja y chocolate es una combinación ganadora. Por eso esta tableta de chocolate negro con naranja y nueces funciona tan bien. Hacer tabletas de chocolate con distintos ingredientes es una actividad muy bonita para hacer con niños los fines de semana. Con slow cooker resulta segura, ya que el riesgo de que el chocolate se queme es menor, no se maneja fuego ni baño María, y el chocolate puede pasar un tiempo largo en el recipiente apagado sin que se endurezca.
Los frutos secos también se llevan bien con este tipo de elaboraciones. Yo he usado nueces, pero puedes utilizar avellanas, almendras o anacardos tostados. Las naranjas confitadas resultan bastante caras si se compran en tiendas o grandes superficies, pero hacerlas con slow cooker es muy fácil. Lleva un poco de tiempo, pero quedan estupendas y se pueden hacer con ellas muchos dulces y elaboraciones.
Si quieres obtener una tableta con brillo y sin riesgo de que blanquee, es imprescindible atemperarlo, una operación que se puede hacer también con el slow cooker con ayuda de un termómetro de cocina y una espátula. A partir de esta receta seguro que se te ocurren otras versiones con distintos ingredientes.
Preparación: 10 minutos
Cocción: 30 minutos
Función: ALTA
Raciones: 1 tableta
200 g de chocolate negro para postres o de cobertura
50 g de naranjas confitadas secas
3 nueces peladas
Trocea las naranjas confitadas y las nueces y distribuye una parte en el fondo de un molde para tabletas.
Atempera el chocolate según estas instrucciones.
Cuando el chocolate esté en la temperatura de uso, viértelo en el molde sin que llegue al borde.
Deja caer el molde en horizontal varias veces sobre la encimera para que el chocolate se distribuya y se eliminen las burbujas. Coloca sobre el chocolate el resto de naranjas confitadas troceadas y las nueces.
Deja enfriar por completo durante un día a temperatura ambiente y desmolda.
Adecua la cantidad de chocolate utilizado en función del molde que uses. Ten en cuenta que, durante el atemperado, se puede perder una pequeña parte del chocolate, por lo que es recomendable añadir un poco más desde el principio.
La naranja, el chocolate y las nueces hacen una buena combinación, pero puedes utilizar otros frutos secos o prescindir de ellos si tienes alguna intolerancia.
Atemperar el chocolate es imprescindible para conseguir una tableta de chocolate brillante, sin blanqueamientos, con buen paladar y que se conserve bien.
Las tabletas de chocolate se pueden formar con moldes de policarbonato o de silicona. Si los moldes tienen el interior brillante, el chocolate quedará con una superficie brillante perfecta. Si no dispones de un molde, puedes hacer una gran lámina de chocolate sobre un tapete de silicona y trocearla cuando esté completamente fría.