Escribo esta receta pegada como con velcro a la silla de mi estudio. Hace un calor de esos que derriten estatuas y fríen huevos en las rocas. Calor de agua fresca y ensalada, de piscina urgente y ducha nocturna. Apetecen cosas frías y ligeras en el plato: ensaladas, verduras en escabeche, legumbres en vinagreta, carnes frías y fruta fresca.
Las lentejas beluga –también se les llama lentejas negras o caviar–, llegaron hace un tiempo a casa con la intención de quedarse para siempre, allí, sentaditas en mi despensa, esperando a que me entren unas irremediables ganas de legumbre al dente. Quedan estupendas en guiso caliente con verduras, pero cuando llega el calor, se convierten en las mejores amigas de las ensaladas de legumbres.
Y en esta semana de calor sin tregua, no he encontrado mejor manera de comerlas que en ensalada. Una ensalada de lentejas beluga, sardinas y brotes sencilla de hacer y que se puede –se debe– tunear adecuadamente, según los gustos de cada uno o en función de lo que se encuentre en el mercado. Una base de tomate cortado muy fino, un coro de lentejas y verduras crudas aliñadas, unas sardinas en aceite de oliva y unos brotes de rabanito, no te darán la felicidad suprema, pero te dejarán doblemente satisfecho y nutrido.
- 250g de lentejas beluga
- 1 cebolleta
- 1 zanahoria
- 4 dientes de ajo
- Sal
- 1 tomate de ensalada
- ½ pimiento verde
- ¼ de pimiento rojo
- ½ cebolla roja
- 100g de sardinas marinadas en aceite de oliva (vale también en conserva)
- 70g de brotes de rabanitos
- Hojas de lechuga batavia
- Aceite de oliva virgen extra
- Vinagre de Jerez
- Pimienta negra recién molida
- Sal
- Pon las lentejas en remojo durante 8 horas. Escurre, enjuaga y colócalas en el slow cooker junto con la cebolleta cortada en cuatro, la zanahoria en rodajas gruesas y los dientes de ajo sin pelar abiertos con un golpe. Añade un poco de sal.
- Cocina durante 8 horas en BAJA o hasta que las lentejas estén firmes pero con el interior tierno. Las lentejas beluga siempre deben dar la sensación de estar "al dente".
- Elimina los restos de los ajos, la cebolleta y la zanahoria, y pasa las lentejas con su caldo a un recipiente. Deja que se enfríe por completo y refrigera durante varias horas.
- Antes de servir, pica los pimientos y la cebolla en cuadrados finos.
- Corta el tomate en rodajas muy finas.
- Trocea las sardinas en trozos de dos centímetros.
- Escurre las lentejas y desecha el jugo.
- Coloca las lentejas escurridas en un bol grande, añade los pimientos y la cebolla que has picado, las sardinas troceadas y mezcla. Aliña a tu gusto con aceite de oliva, vinagre, sal y pimienta.
- Prepara los platos poniendo rodajas de tomate en la base, hojas de lechuga batavia y encima varias cucharadas de la mezcla de lentejas.
- Coloca encima los brotes de rabanito y sirve.
Las lentejas beluga también se llaman lentejas negras o lentejas caviar, y son pequeñas, redondas y negras como balines. Búscalas en mercados gastronómicos, tiendas especializadas en legumbres o, si la cosa se da mal, puedes comprarlas online.