Esta receta de coquelets rellenos está pensada para mesas navideñas con pocos comensales. Porque las celebraciones de Navidad no siempre son multitudinarias, y hay hogares en los que se pone una mesa para dos o, como mucho para cuatro, y comprar grandes piezas no es viable. Los coquelets son pollitos con un peso entre 500 y 600 gramos, perfectos para hacer dos raciones por pieza. Son ricos, tiernos y con una presentación excelente, por eso me gustan para mesas festivas, acompañados con una salsa y una guarnición o un relleno, como en este caso.
Deshuesar aves para rellenarlas es una tarea compleja que no está al alcance de todos. Se requiere maña, paciencia, un cuchillo especial y saber por dónde rascar. Por eso estos coquelets rellenos están enteros, con su carcasa intacta. El relleno, una vez cocinados, calientes y cortados en dos, se despega con cuidado y se sirve como guarnición. Llevan un relleno a base de pan del bueno –no pongas pan común de barra–, nueces y jamón que queda muy bueno cocinado con los jugos del pollo.
La salsa es facilona y no tiene ninguna complicación: basta con recoger los jugos que queden en el fondo del slow cooker tras el cocinado, pasarlos a una cazuela colados, añadir un poco de espesante instantáneo de fécula de patata de Maizena y cocinar unos minutos.
Cómo hacer coquelets rellenos de nueces y jamón en slow cooker
- 2 coquelets limpios de vísceras
- 100 g de pan de harina integral (centeno, espelta, etc.) sin corteza
- 50 g de nueces sin cáscara
- 75 g de jamón en tacos muy finos
- 1 cucharadita de mostaza
- 1 huevo
- 1 diente de ajo
- ¼ de una cebolla pequeña
- Tomillo fresco
- Sal
- Pimienta negra y blanca
- Aceite de oliva virgen extra
- Elimina la punta de las alas cortando por la articulación. Corta el saliente triangular de la rabadilla y retira las masas de grasa si las hubiera.
- Corta el pan en dados pequeños.
- Corta el ajo y la cebolla en dados muy finos.
- Trocea las nueces toscamente.
- Coloca el pan, las nueces, el ajo, la cebolla, el jamón y una cucharada sopera de hojas de tomillo en un bol y mezcla.
- Bate el huevo con una cucharadita de mostaza, añádelo a la mezcla y remueve hasta que se integre por completo. Añade sal y pimienta negra al gusto.
- Rellena los pollitos apretando para que el relleno no quede holgado.
- Sujeta las patas con un hilo de cocina largo, haz un nudo y sujeta con el mismo hilo las alas para que el coquelet no se deforme durante la cocción.
- Pincela los pollitos con aceite de oliva, espolvorea con sal y pimienta, y colócalos en el slow cooker.
- Cocina durante 2 horas en ALTA o hasta que estén tiernos.
- Sácalos del slow cooker, elimina el hilo de cocina, córtalos por la mitad y colócalos en una bandeja de horno. Mételos en el horno precalentado en función grill hasta que la piel quede dorada.
- Recoge los jugos del fondo del slow cooker, cuélalos para eliminar restos de carne y ponlos a cocer en un cazo con dos cucharaditas de espesante instantáneo de fécula de patata de Maizena.
- A la hora de servir, separa el relleno con una cuchara y sírvelo junto al pollo regado con la salsa.
El pan que utilices marcará el carácter y sabor del relleno. Te recomiendo panes de harina integral, preferiblemente de masa madre y fermentación lenta.
Utiliza la mostaza que uses habitualmente. Yo he usado mostaza a la antigua, porque es la que tengo habitualmente en casa, pero te irá bien cualquiera que sea a tu gusto.